¿Crees que en tu vida hay demasiado fracaso? Sólo cuando aprendemos a aceptar lo que nos ha pasado, por duro o terrible que sea, es cuando podemos empezar a transformarlo en un camino inesperado para construir los éxitos que se nos estaban resistiendo.
La vida que tienes
depende de cómo interpretas lo que te sucede.
Juan Dharma
El mito de la mala suerte y el fracaso
- Pierden su trabajo.
- No encuentran pareja.
- La mayoría de sus proyectos fracasan.
- Tienen accidentes constantemente…
Estas personas miran con envida a los que parecen haber nacido con buena estrella y les sale siempre todo bien, aquellos que parece que no han tenido un fracaso en su vida:
- Tienen un trabajo estupendo.
- Su pareja es maravillosa.
- Han montado una exitosa empresa.
- Todo les sale bien.
El secreto de la buena suerte
Los que creen en la mala suerte tienen una actitud de víctima:
Mi vida es un fracaso.
¿Por qué siempre me pasan estas cosas a mí…?
¡Ojalá llegue el día en que algo me salga bien de una vez!
Si pudiera tener suerte por una sola vez en la vida…
Con esta mala racha que llevo no podré levantar cabeza nunca…
Los que no culpan a su suerte de lo que les ocurre construyen sus éxitos haciéndose la pregunta:
¿Qué oportunidades me ofrece este «fracaso»?
¡Dale la vuelta! Cualquier suceso en tu vida supone nuevas oportunidades que no vas a ver si constantemente te estás quejando de tu «mala suerte».
Piensa en cualquier suceso negativo de tu vida que pasara hace más de cinco años… Y, por terrible que fuera pregúntate:
¿Hay al menos dos cosas positivas que fueron posible
precisamente por esa «mala experiencia»
y que no habrías tenido de otra forma?
Por supuesto no se trata de justificar que aquello malo que pasó tuviera que pasar, o que mereciera la pena ni nada por el estilo. Lo que se trata es de darse cuenta de que:
Cuando nos pasa algo malo, ¡YA HA PASADO!
Y ya que no queda más remedio que sufrir sus consecuencias,
así que…
¿Por qué no aprovechar las nuevas oportunidades que aparecen?
Porque al final, cuando nos pasa algo malo no queda más remedio que seguir adelante. Y puedes elegir:
- Ser la víctima de un fracaso, que no puede levantarse porque «tiene mala suerte».
- Tener la valentía de construir tu vida y tus éxitos.
No te encierres en casa… ¡SAL A VIVIR!
Internet nos ha traído una enorme cantidad de ventajas… Pero también tiene algún inconveniente: Mucha gente piensa que desde casa puede hacerlo todo.
Es muy cómodo resolver muchas cuestiones sentados en casa, pero…
- Salir fuera del mundo digital.
- Hablar con otras personas, intercambiar gestos, palabras, momentos…
- Hacer deporte.
- Aprender algo nuevo…
En el fondo, se trata de que conozcas y te relaciones con otros seres humanos, que tienen problemas parecidos, que pueden darte buenas ideas, que os podéis asociar para cumplir vuestros objetivos…
Convierte los fracasos en oportunidades
Y si quieres aprender tres consejos que te ayudarán a ver la vida como un campo lleno de oportunidades te invito a ver este vídeo:
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